En la primera parte de esta reseña, los panelistas expresaron sus puntos de vista sobre el concepto de la ecoansiedad – que se ha vuelto desafortunadamente un tópico de tendencia en los medios – y la compleja realidad que se relaciona con el miedo al contexto actual de crisis climática que es necesario comprender, a nivel íntimo y a nivel sistémico, con una perspectiva de duración temporal. La ecoconsciencia y la ecolucidez han de relacionarse a la vez con la ansiedad social y la ansiedad política, por ejemplo en los campos de la vida cívica en democracia o en el quehacer artístico. Es necesario movilizarse y actuar, ya sea apoyados en la generación de imaginarios, ya sea a través del militantismo, pasando por el empoderamiento. Cada quien a su manera, pero buscando el bien colectivo. En esta segunda parte, los panelistas se concentran en los imaginarios y la acción para sobrepasar la ansiedad en sus diversas formas.
Segunda de dos partes. Movilizar a través de los imaginarios
Gabriel Malek, presidente de Alter Kapitae, consultor senior de post-crecimiento, señala que el tema de la ecoansiedad ha sido ligado al fatalismo, a un miedo que puede petrificar, pero gracias a las relaciones personales que van desde el círculo familiar o de amigos hasta el colectivo, es posible regenerarse y actuar en términos de movilización.
Como transición, Gabriel Malek comenta que él disfrutó leyendo una colección de manga con el trasfondo de la transición y los imaginarios. Le parece necesario contar con narrativas que ayuden a proyectarse; por ejemplo, cuando a las empresas se les habla del post-crecimiento. Valérie Martin, experta en el activismo y comportamientos ciudadanos relacionados con la ecología, indica que necesitamos de narrativas que empoderen: que acompañen el paso a la acción y que permitan proyectarse en una contranarrativa con respecto a la actual y mayoritaria (de consumismo, utilitarismo, productivismo…) hacia las sobriedades deseadas y de resiliencia secundaria. Es decir, reinventarse reflexionando sobre el mundo en que uno quiere vivir y trabajar, con qué formas de producción y consumo, cómo vivir juntos, qué tipo de relaciones con el Otro y con los otros… porque estamos en crisis en este tipo de relaciones. Para ella, no es con dogmatismo que iremos al mundo de mañana. El 30 de noviembre de 2021, la ADEME publicó « Transiciones 2050 »: cuatro escenarios resultantes de un trabajo inédito de prospectiva que duró dos años. El objetivo de este ejercicio fue contribuir a reunir elementos de conocimiento técnico, económico y social afin de proponer cuatro caminos “tipo”, coherentes y contrastantes, para llevar a Francia hacia la neutralidad de carbono en 2050. Destaca las principales lecciones y plantea las problemáticas que podrían alimentar el debate sobre las opciones posibles y deseables. Los escenarios van desde la reducción drástica de actividades hasta el status quo sin cambio porque se cree que la tecnología va a ser capaz de resolver el desafío. A su vez, los escenarios se declinaron en nueve boletines temáticos: la mezcla eléctrica; los materiales de la transición energética; los efectos macroeconómicos; los modos de vida; el sector de proteínas; el sector de los últimos kilómetros; el sector de la construcción nueva; el sector del gas y de los carburantes líquidos; la adaptación al cambio climático; los suelos; los territorios. Hubiera sido deseable que se incorporara esta reflexión en los temas de la campaña electoral de Francia de 2022, pero no tuvo mucho eco ni en los programas políticos ni en los medios. Para Valérie Martin, no se trata de que todos pensemos lo mismo, sino que debatamos sobre el camino que va a convenir a nuestra sociedad. En ese sentido, han desarrollado acciones para vulgarizar los conocimientos – con el fin de que el vocabulario no se quede a nivel de expertos – y participado en diversos tipos de foros, festivales o generado un podcast intitulado « Demain c’est pas loin – Mañana no está lejos » con nueve episodios. Cita otras acciones de la ADEME en el campo de la co-generación de nuevas narrativas con el ciudadano en el centro, en el corazón de la transición – no son prescriptores – colaboran por ejemplo con la panelista Magali Payen, directora general de Newtopia, fundadora de OnEstPrêt e Imagine 2050; con la Fabrique des récits; el Fresco de las nuevas narrativas (La fresque des nouveaux récits); o la particularmente interesante Asamblea ciudadana de los imaginarios (Assemblée citoyenne des imaginaires): se trata de cocrear nuevas historias cuyo proceso de escritura involucre tanto un panel de ciudadanos, guionistas profesionales inspirados en aportes ciudadanos (experiencias e historias) y expertos acompañando a los ciudadanos y los guionistas hacia estas nuevas historias. El objetivo final es producir obras de cultura popular arraigadas en las experiencias, aspiraciones y sensibilidades de los ciudadanos, que estén a la altura de los grandes desafíos de nuestro tiempo y que combinen pedagogía, sueños colectivos y entretenimiento. Han recibido ya alrededor de 55.000 contribuciones de la sociedad civil a los cuestionarios iniciales y se han escrito 150 narrativas a partir de ellas realizadas por los guionistas, entre los cuales un cierto número han colaborado en una residencia de escritura. El sábado 14 de octubre de 2023 se presentará parte de las sinopsis de estas historias en el marco del Festival de cine Atmosphères en Courbevoie. Más tarde, en diciembre, la gente podrá votar para seleccionar las mejores. Finalmente, Valérie Martin señala que trabaja especialmente en relación con el papel de la publicidad y recomienda visitar el sitio web de la ADEME donde se puede consultar un reporte de Jules Colé (2022) sobre los imaginarios intitulado « ¿Cómo podemos hacer evolucionar nuestra imaginación para cambiar nuestras relaciones con el mundo vivo y avanzar hacia un mundo sostenible y armonioso? » que es actual y concreto.
Por su parte, Magali Payen retoma la importancia de reconectarse con la naturaleza para reducir la ansiedad y el estrés. Concuerda con Valérie Martin con respecto al imaginario sobre la sobriedad que es necesario cocrear con la gente a través de procesos de participación democrática. Ellos también trabajaron con expertos en un ejercicio de prospectiva en que se habló del post-crecimiento (¡puede haber crecimiento en la salud, en el bienestar…!) o de remplazar el indicador de PIB por uno de bienestar general. Ella insiste en el imaginario de la ayuda mutua (entre-aide) que será indispensable en términos de resilencia colectiva o individual. Agregó que ellos colaboraron con los guionistas de una serie de televisión francesa exitosa llamada « Plus belle la vie » en cuanto a un tema: el de un apagón. Los guionistas solamente podían pensar en un estado de guerra civil como resultado del apagón, mientras que ellos les mostraron ejemplos de historias verdaderas (como en Texas) donde prevaleció la cooperación y la ayuda mutua. Gabriel Malek concuerda y agrega que ambas son un prerrequisito para la movilización colectiva.
Tanguy Descamps recomienda la lectura de un libro intitulado « Alienación y aceleración: Hacia una teoría crítica de la temporalidad en la modernidad tardía » del filósofo y sociólogo alemán Hartmut Rosa. En otro orden de ideas, señala que las universidades están incorporando estas cuestiones en sus planes de estudio o cursos. El desafío actual es poder masificarlo. Observa que aumenta el número de talleres participativos como los Frescos, con ventajas con respecto a las presentaciones magistrales.
Gabriel Malek desea concluir la mesa redonda con una pregunta sobre la politización amplia del debate ecológico. Valérie Martin señala que no se construye « en contra » si no « para », no hay que pasar el tiempo designando al adversario, al culpable, sino trabajando juntos con sinceridad, humildad y transparencia. Subraya la importancia de la cooperación alrededor de proyectos de territorio (administraciones públicas, instituciones públicas, empresas, ciudadanos, asociaciones…). Citó el ejemplo de La Fabrique des transitions: la Fábrica de Transiciones nació entre cuatro ciudades en el norte de Francia – Loos-en-Gohelle, Grande Synthe, Malaunay y Le Mené – que llevaban varias décadas comprometidas en una estrategia de transición de sus territorios hacia sociedades sostenibles, a través de su deseo de comparar sus experiencias para buscar principios rectores comunes de valor general, lo que las motivó a generar una Carta de compromiso. Hoy se han reunido a esta reflexión 400 territorios. Cita otras experiencias en que las palabras clave son la malla/red territorial, como con la asociación Make Sense y el proyecto GHETT’UP.
Tanguy Descamps desea que recordemos el modelo del dónut y los límites planetarios y que éste forme un terreno común. Hay muchas formas de comprometerse así como visiones distintas (post-crecimiento, crecimiento verde, RSE, decrecimiento…) No desestima el conflicto con las visiones contrarias que no toman conciencia de la problemática medioambiental y que se mantienen en dicha postura. A un momento dado es necesario asumir el conflicto político. Hay que portar los imaginarios del decrecimiento y de la sobriedad de manera positiva. Gabriel Malek recuerda en este sentido el diálogo de sordos reciente durante la universidad del MEDEF (sindicato francés de patrones de empresa) con la reacción negativa del director de la empresa TotalEnergies en cuanto a la urgente necesidad del cambio energético señalada por el climatólogo Jean Jouzel (03/09/2023).
En el corto periodo de preguntas y respuestas restante se manifestó la cuestión de la posición de la ADEME con respecto a sus tutelas y la postura del gobierno actual. ¿Cómo ir más allá de la triple tutela y que llegue su trabajo al conjunto gubernamental francés? Valérie Martin responde que ya hay un eco fuerte y su rol es aconsejar a los ministerios de tutela para acompañar la toma de decisiones. Pero hay un tiempo de preparación y un tiempo de la presentación política y eso es complejo. Por ejemplo, el término « sobriedad »; Valérie Martin lleva treinta años en su estructura y lo han usado desde hace mucho tiempo. Sin embargo, con el reciente « Plan de sobriedad energética » apenas ha tomado sus cartas de nobleza. Por otro lado, con respecto al enfoque sistémico, en el plan de formación de todos los funcionarios franceses se incluye actualmente y mas aún en los ministerios de tutela. Los temas ecológicos irrigan todos los campos de la acción pública. La fuerza de la ADEME es trabajar en el campo de la investigación y de los conceptos, así como estar presente por todo el territorio francés. Esta territorialización de las iniciativas es esencial.
Finalmente, una participante del público comentó una experiencia de una película documental en edición actualmente sobre un liceo en que se habla de ecología con continuidad pedagógica y que tuvo resultados positivos entre los alumnos ya que se sintieron orgullosos de participar, incluso a su joven edad. La realizadora del documental tiene entonces esperanzas sobre la posibilidad del cambio. Valérie Martin recuerda en conclusión que hay una figura en la educación nacional francesa llamada « los ecodelegados » que son alumnos de las clases de secundaria y preparatoria elegidos por los estudiantes de su clase. Estos ecodelegados juegan un papel esencial en la sensibilización y movilización para ayudar a que las escuelas secundarias y preparatorias sean espacios más favorables a la biodiversidad y estén más comprometidos con la mitigación y la adaptación al cambio climático.
El Festival Anticipation nació del encuentro entre dos perspectivas – artística y ecológica – materializadas por la colaboración de la agencia de producción artística togaether, y la agencia de consultoría en estrategia sostenible Tactic/14Septembre.
Fotografías de François-Xavier Guillet y de Rafael Mandujano.
El autor no ha tenido – a la fecha – ninguna relación con los organizadores. Esta reseña muestra independientemente su reconocimiento al trabajo realizado en beneficio colectivo.